En esta segunda parte de Los Tres Mosqueteros comienzan a cerrarse muchos cabos que no habian quedado resueltos en la primera. Como el titulo lo sugiere, se centra en la figura de Milady, que es la que lleva el hilo de la trama.
Contraviniendo el dicho que segundas partes no son buenas, en esta oportunidad, en forma personal, disfruté mucho mas de ésta que de la anterior. En mi opinión, es una decisión muy acertada haberse separado más de la novela en sí para transformarse en una película de capa y espada más convencional.
La trama está mejor resuelta, con enfrentamientos más creibles, apoyados con una filmación casi a hombros del actor, lo que permite una perspectiva más realista de la acción que se desarrolla, haciendo que el espectador se sienta inmerso en la misma.
Habrá que estar atentos a una posible continuación de la historia, como nos lo sugiere la última toma.