Angela (Carla Peterson) y Vera (Julieta Díaz) son dos mujeres muy distintas pero de fuerte carácter que se conocen de manera fortuita. Cuando Edgardo, un médico polémico que promete la belleza eterna, entra en escena, ambas deciden arriesgarlo todo para desenmascararlo.
Al ver el poster, el argumento y a las famosas protagonistas, pensé que me iba a encontrar con una comedia genérica de las que escribe Suar o protagoniza Francella y que venden millones de entradas, pero que sus chistes no pasarían ni el primer filtro de un parodista que no pasó a la liguilla. Sin embargo, estaba equivocado.
Su estilo narrativo similar al de un cómic es arriesgado. Sus personajes, exagerados y creíbles, exponen dramas de forma natural, haciendo que nos creamos hasta la postura más histriónica. Julieta Díaz y Carla Peterson le meten ritmo y hacen una gran dupla donde destaca lo absurdo pero con realismo y humor negro.
Es interesante cuando se mete en el terreno de las cirugías plásticas. Hace crítica pero sin bajar línea. Maneja bien los grises y la sutileza aún explotando al máximo las excentricidades de los personajes, donde la rompe Salvador del Solar en el papel del cirujano chanta, y los secundarios en líneas generales son graciosos (sobre todo Fito Paez haciendo de sorete machista).
Es imposible dejar de pensar en el caso de Lotocki y la muerte de Silvina Luna. Pareciera haber sido hecha con un timing perfecto. Es imposible ver a los que hacen de víctimas de la mala praxis sin pensar en el caso real, y cómo lamentablemente es algo muy vigente. Sin embargo, el guión fue escrito hace 5 años, y resulta irónico que recién este año consiguiera aprobación de una productora porque, según dijo su guionista Azul Lombardi, se lo rechazaban por inverosimil. Situación digna de un capítulo de Los Simpsons.
¿Lo bueno? Todo lo que puse arriba
¿Lo malo?
- Claudia Fernández, con su actuación acartonada y amateur digna de una película de Tommy Wisau. Por suerte aparece menos de 5 minutos
- El chiste de “Segundo, Francia”. Basta, muchachos. Nunca fue gracioso ni lo será. Se tiró Messi, penal para Argentina
Juan Pablo Aguirre